El Rol de la Motivación en la Actividad Física

Por Rodolfo Bastias Lemp


   Es el estilo de vida del individuo un factor preponderante al momento de analizar el estado de salud de las personas. Existen diversas investigaciones que ratifican el sedentarismo y una alimentación inadecuada los con mayor influencia negativa para el organismo, por tanto, asoma como solución el combatir estos estilos, así como el que las personas sean físicamente activas, ya que en ellas se disfruta una mayor calidad y esperanza de vida.

   El cómo entendemos actividad física, ejercicios y deporte lo podemos obtener desde lo que propone la Organización Mundial de la Salud.

   El punto es ¿es beneficioso para toda persona el realizar ejercicio físico? Se ha visto que existe un porcentaje de personas que presentan una “respuesta adversa” a los ejercicios asociado a alguna patología que ya padece, como por ejemplo un factor de riesgo cardiovascular que empeoró en vez de mejorar y se teme que se utilicen  este tipo de investigaciones para evitar el que se realicen actividades físicas. Pero, ¿son sólo los efectos físicos los necesarios para motivar una mejor calidad de vida?

   Hoy en día se profundiza en el hecho de que la motivación por realizar actividad física genera una disciplina que se mantenga en el tiempo. Las personas no ven constantemente los beneficios en sus lípidos o su regulación en la presión arterial. Lo que se experimenta son los cambios motivacionales y este es el punto que hace referencia esta nota: Motivación como el hedonismo por la práctica,  una sensación de grata energía, un aumento en el estado de ánimo.

   Muchas personas habitualmente activas en el deporte han debido de dejar su práctica regular por lesiones o por sus propias exigencias de vida personal. Constantemente echan de menos esa sensación de placer física y continúan su vida con esa melancolía, pero es importante entender la situación que afecta al organismo así como el generar nuevas estrategias para conseguir nuevamente ese bienestar. Existe otro tipo de personas que pese a una lesión y la prohibición médica de realizar la actividad física, no abandonan su deporte y continúan en él pese al riego que este implica, lo que no es recomendable.

   Lo fundamental es hacer frente a esta melancolía por el placer que genera la actividad física y desarrollar estrategias que nos permitan alcanzar este placer. La respuesta la tienen aquellas personas que practican su bienestar en el presente, en un estar corporal, desde la conciencia de la respiración hasta la de moverse, desde los sueños en movimiento hasta la práctica de alguna actividad atingente y segura para lo que nuestro organismo puede tolerar. La actividad física, bajo estos parámetros, puede ser realizada en distintos tipos actividades (como yoga, o deportes de bajo impacto), en nuestros traslados (caminando, trotando o en bicicleta) incluso dentro de nuestros lugares de trabajo y tareas hogareñas, como lo realizan en la cultura de oriente, cuando van realizando meditación en el proceso en los cuidados de sus pequeños huertos.

   Sin lugar a dudas la mayor motivación de realizar actividad física la extraje del testimonio de la Dra. Lawless, quien hoy, de 59 años, expone que “su motivación es el deseo de mantenerse activa y flexible para el resto de su vida”. Agregaría que es el estar “motivado y lo suficientemente activo para disfrutar de la vida y de los míos” (ver articulo New York Times).

Referencias:

http://well.blogs.nytimes.com/2012/06/18/commitment-to-exercise-relies-largely-on-feeling/?ref=health

Bouchard C, Shephard RJ, Stephens T, eds. Physical activity, fitness and health. International proceedings and consensus statement. Champaign: Human Kinetics, 1994.

Blair SN, LaMonte MJ, Nichaman MZ. The evolution of physical activity recommendations: how much is enough?. Am J Clin Nutr 2004; 79 (suppl), ps: 913S-20S.

Onzari M. Introducción a la nutrición deportiva. En: Onzari M. Fundamentos de Nutrición en el deporte. Onzari M. ed. Editorial El Ateneo. 1era edición. Argentina 2004, ps: 2-7.